Acerca del Masaje
El masaje de relajación es una forma de estímulo físico, de preferencia, manual sobre el organismo que provoca reacciones biológicas, metabólicas, psicológicas y sociales beneficiosas. Probablemente es la herramienta terapéutica más antigua que el ser humano utilizó para proporcionar un recurso natural contra el dolor. Su evolución y uso ha sido parejo al de la sociedad, hasta convertirse en la técnica de “tacto estructurado” que hoy conocemos.
Algunas de las principales hormonas influidas por el masaje son:
- Dopamina: Influye en los estados de ánimo, el masaje incrementa el nivel disponible de dopamina en el cuerpo y puede explicar el placer y la satisfacción experimentados durante este.
- Serotonina: Influye en el comportamiento adecuado en el momento adecuado, regula las situaciones de desánimo, modula el ciclo de sueño/vigilia, se ha detectado un nivel de serotonina en depresión y en alteraciones de la alimentación. El masaje sube los niveles de serotonina.
- Epinefrina / Norepinefrina: Estas son las sustancias químicas implicadas en la activación, el despertar, el estado de alerta, y en la respuesta lucha/huida. Si sus niveles suben se manifiesta una hipervigilancia, hiperactividad, alteración del sueño. Si sus niveles bajan la persona se siente perezosa, somnolienta, fatigada, dificultad para despertar.
- Oxitocina: Hormona implicada en los afectos, en el sentido de compromiso y de unión emocional con otras personas (pareja, padres, amigos, etc.) El masaje sube los niveles de oxitocina lo que explicaría el sentimiento íntimo y de conexión que proporciona este.
- Cortisol: Es la hormona del estrés. El masaje baja los niveles del cortisol.